
Las oscilaciones estelares forman patrones tridimensionales, similares a una cuerda de guitarra o una carcasa de batería, en una y dos dimensiones respectivamente.
Científicos de la Universidad de Granada y del Instituto de Astrofísica de Andalucía también están utilizando los fractales para estudiar por primera vez la música que emiten las estrellas con un susurro constante de fondo ‘como un público molesto en una sala de conciertos’ , lo que hace que difícil de escuchar.
Las estrellas, como otros muchos objetos naturales, desde la geometría de una coliflor hasta el perfil de una montaña, presentan un comportamiento fractal, lo que significa que su estructura es similar a todas las escaleras.
La mayoría de estrellas son variables pulsantes, con cambios periódicos de brillo a lo largo del tiempo , ya que las ondas de densidad y temperatura que hay en su interior llegan a la superficie de la estrella, haciéndola oscilar, provocando cambios en su brillo.
Estas fluctuaciones estelares forman patrones tridimensionales, similares a una cuerda de guitarra o una carcasa de batería, en una y dos dimensiones respectivamente.
Un equipo de investigadores de la Universidad de Granada (UGR) y del Instituto Andaluz de Astrofísica (IAA-CSIC), expertos en una rama de la astrofísica llamada asterosismología, analizaron estas fluctuaciones de luminosidad para clasificar a las estrellas pulsantes en distintos tipos en función de su estructura interna. y propiedades físicas, como se hace con los instrumentos musicales.
En un comunicado, el investigador Juan Carlos Suárez Yanes, del Departamento de Física Teórica y Espacial de la Universidad de Granada y Sebastiano de Francisci, del IAA-CSIC, explicaron que la música de una estrella que pulsa tiene un ‘ susurro constante. al fondo, como un público enojado en una sala de conciertos que dificulta la escucha.’
Estos científicos han estudiado por primera vez el ruido de fondo que existe a la luz de las estrellas como objeto fractal cuyas propiedades se manifiestan en la luz de las estrellas pulsantes.
Los investigadores aplicaron un algoritmo basado en el análisis armónico de Fourier, que examina la representación de funciones o señales como una superposición de ondas o armónicos ‘fundamentales’, series temporales con propiedades fractales, para separar de forma eficaz y sencilla la música estelar del molesto ruido de fondo.
Este método nos permitió limpiar las fluctuaciones de la música estelar que forman parte del ruido para identificar y caracterizar mejor a las estrellas variables, un paso importante hacia la comprensión del número creciente de mecanismos físicos que impulsan las estrellas pulsantes. ahora puedes ver el interior con mayor claridad.

Susan McDonald se especializó hace años en el avistamiento y el estudio de estrellas. Nos ha demostrado la importancia del cálculo algorítmico y la precisión para analizar los astros, y ha redactado los mejores artículos de la web para estudiarlas. Practica meditación y trabaja en un centro de astrología cerca de su ciudad.